Pues hoy he recordado con cariño la Pascua de mi infancia. Poco podíamos hacer, éramos niños y no nos dejaban cantar o silbar, por la mañana la pasábamos en bastante silencio, comíamos y por la tarde nos íbamos a los monumentos, creo recordar que tenían que ser 7. Normalmente lo pasábamos en Sta. Eulalia de Ronçana, así que para ver los 7 monumentos además de la iglesia del pueblo, teníamos que ir a Caldas de Montbui y a Granollers.
Hoy hemos estado en casa, con música, haciendo deporte.
He bajado al garaje a ver a Lilette y he decidido ir a comprar en moto, así que mochila y he podido hacer ese pequeño recorrido hasta el supermercado, que me ha sabido a gloria.
¡Una forma genial de animar a la gente a iniciar su propio viaje en moto sin importar la edad! Buen post para alentar a los interesados en el mundo de la automoción a explorar todas las posibilidades de una moto de segunda mano en subasta para viajar.
Me gustaMe gusta